El glorioso Emperador de Francia, fue un enamorado del Juego Ciencia . Desde muy joven, dejó su legado en la teoría del ajedrez con la Apertura Napoleón, en una variante de la Escocesa y, por si fuera poco, utilizó la Defensa Alekhine antes que el Campeón Mundial alemán, a quien posteriormente le dedicaron el nombre
Napoleón Bonaparte jugó ajedrez con frecuencia. Durante su destierro en la isla de Santa Elena pasó largas horas dedicadas a los trebejos. Algunos registros indican que Napoleón era un jugador fuerte ,y disfrutaba mucho las características del juego . Solía jugar contra su mariscal Bertrand y otras personas cercanas.
Una partida notable es la que jugó precisamente contra el mariscal Bertrand, donde Napoleón puso al descubierto su habilidad para el ataque y la combinación. Actualmente se guardan registros de este juego.
Napoleón vs. Mariscal Bertrand
(Gambito Escocés)
- 1. e4, e5; 2. Cf3, Cc6; 3. d4, exd4; 4. Ac4, Ac5; 5. c3, De7; 6. O-O, De5; 7. f4, dxc3+; 8. Rh1, cxb2; 9. Axf7+, Rd8; 10. fxe5, bxa1=D; 11. Axg8, Ae7; 12. Db3, a5;
- Napoleón anunció mate en cinco jugadas: 13. Tf8+, Axf8; 14. Ag5+, Ae7; 15. Axe7+, Rxe7; 16. Df7+, Rd8; 17. Df8++
También se conoce que Napoleón jugó contra "El Turco", un famoso autómata que jugaba ajedrez, en 1809. Sin embargo, en esta partida, Napoleón hizo un movimiento ilegal, lo que provocó que "El Turco" respondiera tirando las piezas al suelo .
Siendo todavía un desconocido oficial de artillería, Napoleón asistía con frecuencia al Café de la Régence, club parisino donde solían reunirse los mejores jugadores de la ciudad. En este lugar se realizarían varios enfrentamientos legendarios entre algunos de los más famosos ajedrecistas de la época.
Como buen estratega en el campo de batalla El Pequeño Cabo demostró poseer facilidades para mover muy bien sus soldados en el tablero de las 64 casillas. Estando en prisión le enviaron un reluciente tablero artesanal con sus correspondiente piezas ornamentales, todas talladas con una «N» mayúscula y una corona imperial.
El regalo llegaba del hermano de un oficial británico al que Bonaparte había ofrecido un trato caballeroso durante la guerra. El obsequio demuestra que su afición por el ajedrez era muy conocida en toda Europa.
Demostrado está. Napoleón Bonaparte fue un estratega en las batallas y en los tableros
Fotos: Pinterest
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